Primeras de Octubre.

Empiezan a dejar su brillo las hojas, que como papiros temblorosos deploran su fin en el letargo. Suicidas que se desprenden como cada año para ser pasto y camino con el que al paso, se confunden los crujidos de éstas ya secas con sus lamentos. Porque el viento las hace hablar en el vuelo, porque ríen mientras danzan su escapada al vacío, su independencia y su olvido. El otoño es así, que mientras la niebla asoma, el sol aún, fuerte y soberbio, lanza sus últimos rayos de potestad para ya sí ir dando paso a un tiempo más invernal, al final, al final…de esta estación que tiñe y viste la esperanza del verde en la energía del carmín. Late con sosiego el corazón de los animales, que poco a poco se dirigen a sus hogares, a descansar y esperar a que la brisa vuelva a mecer el preludio en brotes de la primavera.

Nosotros damos la bienvenida al mes de Octubre, y lo celebramos con muchísimos motivos. Nuestro reto será llegar a 50 publicaciones, y para eso, las puertas como siempre quedan abiertas a nuevos colaboradores, que vengan a este palacio de las letras, bellas y humildes, donde se confunden y fusionan las ideas. Damos la voz a la libertad, porque creemos que así ha de ser. Hay muchas cosas todavía por contar, anécdotas, ensayos, poemas y relatos que contar y pequeños tributos que hacer. Ya se van apilando bastantes publicaciones que serán todas ellas erigidas a esta gloriosa época en la que Rincones de Amago cumple su primer año.

Hace un año emprendimos este viaje, para incentivar, para sugerir y para reafirmar esa línea que siempre debe de estar en nuestra mente. Esa pequeña guarida que escapa y evade, que reniega de tanta condición para ser, por sí, el aullido del lobo a la luna llena en la noche con más templanza. Reunirse con nosotros es hablar de todo, el querer conocer, el crear. Lamentamos el no poder haber publicado tanto como en otras ocasiones en el mes de Septiembre, por eso, ahora que hemos vivido experiencias, venimos a contarlas de la mano de nuestros más intrépidos amigos que se deslizan con la pluma en la mano como bailarines sobre el hielo.

La ilusión nos llena de motivación e inspira, para poder seguir un año más con esta tarea que empezó difuminada en la nada, para ya sí, seguir por este camino que poco a poco vamos creando, como andar por medio del mar, sin rumbo, pero con una dirección, porque caminante no hay camino, se hace camino al andar.

Celebrar que hemos superado durante este año las 30.000 visitas, todo un gozo, gusto y logro que desde estos lares, la dirección y los colaboradores agradecemos profundamente. Hemos sido vistos en toda Hispanoamérica, Estados Unidos, Europa, Asia y España. Estamos convencidos de que hay grandes mentes allá, lejos, pero no lo suficientemente distantes para no poder acercarse a nosotros. Más que una escuela de escritores, somos una familia. Y todo eso es lo bonito de las letras.

¡Bienvenido mes de Octubre, bienvenido Otoño!

Sire